sábado, 29 de enero de 2011

¡Que pena!


Los colombianos tienen una frase muy diplomática para excusarse de una mala atención, un olvido o la incapacidad de atender una necesidad: ¡que pena!.
La frase me impresionó desde que comencé a ir regularmente a tierra bogotanas. "¡Que pena!" antecedía a la inexistencia de un producto, al retraso del tinto o la ausencia de internet en la habitación.
Lejos de considerar negativamente a la expresión, yo la destaco frente al comportamiento de los servidores públicos o privados venezolanos, los cuales tienen por norma no disculparse. Porque "¡que pena!" encierra el reconocimiento de la falta, situación absolutamente inexistente en nuestro país. Aquí nadie se hace responsable por nada, mucho menos se disculpa.
Puede interactuar con el empleado de un banco, una heladería, un ministerio, una tintorería, una cafetería, un restaurant o un hotel 5 estrellas, y en cualquier caso usted nunca recibirá una disculpa aunque la merezca en plenitud.
Conozco varios casos de amigos que han sido víctimas del hampa, y al momento de enfrentarse a poner la denuncia, han sido tratados como víctimarios. Así, ni en el peor de los casos, en Venezuela usted tiene la razón ni puede esperar atención de parte del "servidor" público o privado.
Un caso notable son los "call center" a los cuales - la mayoría de las veces - uno acude con la intención de solventar un problema originado por el prestador de servicio como la empresa de cable, telefonía celular o el banco.
Haga una estadística sobre cuantas veces tuvo que llamar y cuantas veces quedó satisfecho por la respuesta. Apuesto que no pasa del 20%.
Es que yo creo que, en esencia, la existencia de una oficina de reclamos física o telefónica, es de entrada una falla del sistema y por tanto hacer uso de ellas ya debería implicar una disculpa abierta o sutíl de parte del servidor.
Por todo ello, y para empezar a corregir la falta de cortesía con sus usuarios, las empresas que en Venezuela poseen call center u oficinas de reclamos debería recibir a nosotros, los usuarios, con un colombiano: "¡que pena!".
A lo mejor y hasta nos acostumbramos.

sábado, 15 de enero de 2011

El Reto


Hoy sábado 15 de enero de 2011, el presidente llegará a la Asamblea Nacional a rendir su Memoria y Cuenta. Además de las representantes de los poderes del Estado(que bien podrían ser llamadas las chicas superpoderosas + una), los diputados y diputadas, del gobierno y de la oposición, embajadores, señoras y señores, amigos todos, estarán los Ministros y Ministras del gobierno.
En la historia del país, la variación del número de ministerios puede ser calificada como "el acordeón": se extiende y se comprime rítmicamente. Uno pensaría que dicha variación responde a una lógica de organización del gobierno, pero honestamente en los últimos años a mi me parece que los cambios han surgido en momentos de discusión donde alguien dijo "chico, que te parece crear el ministerio tal, .... fusionar los ministerios A y H para crear el ministerio AH, o mejor dicho el MPPAH". Es decir, han nacido de la improvisación.
Por eso yo estoy convencido de que la mayoría de los venezolanos somos incapaces de listar los ministerios presentes en el día de hoy, y mucho menos identificar el jefe a cargo.
De alli que lanzo este reto: sin consultar internet y si quiere apoyado por las imágenes de la Memoria y Cuenta, haga su lista desde ahora hasta que finalice la alocución presidencial (que pueden ser unas buenas 7 horas, como ya ustedes saben)y confrontela con la de sus amigos y posteriormente chequee con la información oficial y pongale nota como si estuviera en la escuela.
Yo pienso hacerlo, y desde ya anuncio que con relación a conocer todos los ministerios y sus ministros 10 es nota lo demás es milagro.