miércoles, 22 de abril de 2009

No todo lo de Lugo está fuera de la ley


El Presidente de Paraguay, el ex-obispo Fernando Lugo está, o mejor dicho ha estado, en la mira en los últimos días debido a la aparición no de uno, ni de dos, sino de tres hijos (por ahora) que han aflorado a través de sus madres.

Los cuestionamientos críticos hacia el hombre reúnen una par de aristas.

La primera crítica es al hecho de que todos sus descendientes fueron concebidos mientras el aún era un sacerdote. Por tanto, Lugo fue un pecador que violó los principios establecidos por su iglesia, que exigen el celibato como ley de vida. Un punto en contra.

El segundo reclamo a Lugo está vinculado con un problema más de sociedad y menos de catolicismo como lo es el no reconocimiento de los hijos por parte de muchos padres. ¿Por qué Lugo, un hombre que se supone recto y católico, que renunció a los hábitos para hacer política, no fue capaz de dar el primer paso y reconocer a sus hijos? ¿No sabía o no quizo saber de su existencia? El sacerdote actuó como lo hace el macho típico Latinoamericano, riega hijos y no los reconode, y si lo hace es después que la madre lo hace público. Segundo strike.

Pero, al menos una de sus acciones demuestra que Lugo no fue un sacerdote que violó todos los principios de la iglesia católica. A pesar de los resultados de su acción parece que el ex-sacerdote si atendió, en los momentos más privados, los lineamientos marcados por la iglesia.

Al menos en tres ocasiones, Lugo no usó el condon.


PD1: Kick Ass Films, empresa productora de películas porno, ha ofrecido a Susan Boyle un millón de dólares para protagonizar una película donde va a perder su virginidad. Ella puede escoger su pareja. Si llegara a aceptar, me pareciría más honesto que las acciones de Lugo.

PD2: Si no sabe quien es Susan Boyle, búsquela en Google y en Youtube.